Los decenios que siguieron fueron de gran actividad, tanto teórica como experimental, para despejar la duda de si el electrón, protón y neutrón eran las partículas elementales de la materia. La sorpresa fue mayor cuando se fueron encontrando cada vez más partículas. El número de ellas y sus propiedades requieren de teorías complejas de la física. Sin embargo, se debe estar consciente de que existe un número muy grande de partículas elementales con diversas propiedades que sólo se pueden entender haciendo uso de teorías sofisticadas, cuyos fundamentos se enseñan en programas de maestría y doctorado.
El esquema todavía es más complejo porque se ha descubierto que para cada partícula hay una antipartícula, de forma tal que al encontrarse se aniquilan, con una gran liberación de energía. En este tema se desconoce por qué esa aniquilación no sucede en forma espontánea en nuestro Universo. Esta incógnita, junto con muchas otras, todavía no tiene respuesta.